lunes, 23 de enero de 2012

Por la mañana


Advertí una nota en su voz, que me señalaba que algo no andaba bien. Te pregunté y como siempre, me besaste con cuerpo presente y mente ausente. Tu beso me supo a despedida, lo corroboraste cuando al llorar, me restallaste la lágrima que caía por mi mejilla y no me dijiste que me querías. A la mañana siguiente, me encontré los cajones vacíos y una nota en tu almohada, no quise leerla, me levanté y me preparé un café a la luz del alba.

jueves, 19 de enero de 2012

Por qué

Cada segundo que paso sola me pregunto; si la vida es algo más que un juego, o si es tan sólo una absurda broma de algún tipo importante que vive ahí arriba, dirigiéndolo todo a su maldito antojo. Porque hay días que no comprendo por qué hay personas que sufren, a las que les duele algo, o que simplemente maldicen injusticias a manos de escoria, que no comprende que pueden llegar a hacer muchísimo daño.
Cada día que pasa me pregunto por qué, en general, la vida es tan injusta de no dejarme estar con él a cada segundo que pasa, que no me deja verle siempre que necesito un ''todo irá bien'' y que no me deje besar sus labios cada vez que tenga miedo de algo.

Y es que supuestamente todo está marcado en algo al que la gente llama destino.
Sinceramente, yo creo que todo eso es una maldita mentira.

lunes, 16 de enero de 2012

Mi amor


Mi amor, nunca entenderás lo mucho que te quiero. Haga lo que haga, diga lo que diga.
Te lo di todo, lo hice todo por ti. Di la cara cuando otros te criticaban y respondí en tu nombre. Te amé como nadie llegó a hacerlo, con el alma.
La gente me decía que te dejara por que creían que eras arrogante, superficial y ególatra. Pero no, para mí eras la perfección personificada, con un halo sobre tu cabeza.Tu rostro era joven, inocente y pícaro a la vez. Tu pelo era brillante, lacio y suave como la seda. Tu cuerpo era perfecto, esbelto, ligero y delicado. Tu voz, un dulce susurro como el de un ángel.Y lo que más he querido nunca de ti, lo que me hace sentir un electrizante escalofrío por la espalda, tus ojos con tonos marrones, mágicos, hermosos, tuyos. Cuando los ví por primera vez sentí que tenían que ser míos. Pero a mí no me hubiera importado tu aspecto con esa personalidad: cariñosa, fiel, educada, inteligente y sobre todo, como todo tu ser, dulce.
Siempre estuve a tu vera aguardando el momento en que me dijeras esas palabras que tanto deseaba al oído y me hicieras todo lo feliz que podría llegar a ser. Sólo te pedí una cosa: que estuvieras conmigo. Pero ese día se me partió el corazón en mil pedazos cuando me dijeron la espantosa noticia.
“No prestó atención y un coche acabó con su vida”.Sólo te pedí una cosa, tú me pedías muchas y todas te las di. En cambio tú, sólo pensaste en ti.

viernes, 13 de enero de 2012

¿Por qué pasamos tanto tiempo esperando que sea el otro el que tenga que "ceder"?


"Trata de verlo de mi modo", dice una hermosa canción de Lennon & Mc Carteney, "Podemos solucionarlo".
¿Por qué pasamos tanto tiempo esperando que sea el otro el que tenga que "ceder"? Acaso porque tendemos a ver la discusión como una competencia en la que sólo uno puede "ganar". ¿Contra quien competimos? Quizá el adversario no sea más que nuestro propio temor al cambio... descubrir que estábamos equivocados total o parcialmente y que deberíamos adaptarnos a una nueva situación.
Intentar verlo de otro modo, ponerse en los ojos del otro... es poder entender mejor la realidad. Acordar más adecuadamente las observaciones inter subjetivas, ajustar la lente.
Discutir es construir. Escuchar serenamente el argumento del otro es una actitud inteligente. Porque el conflicto (entre lo que yo sostengo y el otro cuestiona) es el motor del conocimiento dicen los constructivistas y creo que es una buena definición.
Por eso, evadir las discusiones es perderse lo más rico de la comunicación. Y es algo que solo depende de nosotros.

jueves, 12 de enero de 2012

Me dijiste: camina por la otra acera

Me levanto una mañana. Salgo de mi casa. Hay un pozo en la acera. No lo veo… y me caigo en él.
Día siguiente. Salgo de mi casa. Me olvido de que hay un pozo en la acera… y vuelvo a caer en él.
Tercer día. Salgo de mi casa tratando de acordarme de que hay un pozo en la acera. Sin embargo, no lo recuerdo… y caigo en él.
Cuarto día. Salgo de mi casa tratando de acordarme del pozo en la acera. Lo recuerdo. Y a pesar de eso, no veo el pozo… y caigo en él.
Quinto día. Salgo de mi casa. Recuerdo que tengo que tener presente el pozo en la acera. Y camino mirando el suelo. Y lo veo. Y a pesar de verlo… caigo en él.
Sexto día. Salgo de mi casa. Recuerdo el pozo en la acera. Voy buscándolo con la vista. Lo veo. Intento saltarlo… pero caigo en él.
Séptimo día. Salgo de mi casa. Veo el pozo. Tomo carrera. Salto. Rozo con las puntas de mis pies el borde del otro lado. Pero no es suficiente… y caigo en él.
Octavo día. Salgo de mi casa. Veo el pozo. Tomo carrera. Salgo. ¡Llego al otro lado! Me siento tan orgulloso de haberlo conseguido que lo festejo dando saltos de alegría. Y al hacerlo… caigo otra vez en el pozo.
Noveno día. Salgo de mi casa. Veo el pozo. Tomo carrera. Lo salto… y sigo caminando.
Décimo día. Me doy cuenta, justo hoy de que es más cómodo caminar por la acera de enfrente.

lunes, 9 de enero de 2012

El amor & la amistad

Si me dan a elegir, elijo sin duda la amistad. Es el sentimiento más sincero y puro que conozco. El amor es egoísta, posesivo, excluyente. Los únicos amores bonitos son los que van unidos a la amistad, y lo único que tienen de bonitos es la amistad a la que van unidos.

Supongo que será difícil definir lo que es el amor. Yo lo veo como una mezcla de atracción y deseo de posesión, que a veces va asociado a una entrega absoluta y enfermiza, que no lleva a nada bueno. El altruismo, el querer lo mejor para el otro y todo eso pertenecen a la amistad.

Uno no necesita ser el mejor amigo de su mejor amigo para sentirse completa mente feliz. Sin embargo, en el amor, no puedes estar tranquilo hasta que no eres la persona a la que más ama aquella a la que tú más amas.

Incluso, cuando esto ocurre, vives con el miedo a que deje de ser así. Es absurdo. El amor es un sentimiento absurdo, caprichoso, irracional y egoísta. La amistad no es tan azarosa. Para ganarte la amistad de alguien suele bastar con ofrecer la tuya y, si no es suficiente, es porque o bien esa persona tiene poderosos motivos para no dártela, o bien esa persona no merece tu amistad. Pero el amor no. El amor es una lotería.

La amistad es serena, racional, segura y duradera. Sin embargo el amor siempre pende de un hilo. Es frágil y evasivo cuando lo buscas, pero violento, dañino y persistente cuando lo huyes.

El mejor amigo de mi mejor amigo no soy yo, y esto no me incomoda en absoluto. Me llevo muy bien con él. Más aún: El mejor amigo de mi mejor amigo es uno de mis mejores amigos. Una cosa así no podría pasar en el amor.

La amistad es menos caprichosa, más racional, menos azarosa.